El Internet de las cosas, ¿qué puede significar para una empresa?
Cada día contamos con más dispositivos que se comunican entre ellos sin nuestra interacción. Este concepto es a lo que llamamos «Internet de las cosas», algo que suena muy futurista pero que en realidad es ya parte de nuestro presente.
En realidad es un concepto muy sencillo; conectamos dispositivos a Internet y les permitimos hablar con nosotros, con aplicaciones, con otros dispositivos, etc.
Imaginemos que uno de los vehículos de la empresa se acerca a una zona con un elevado índice de accidentes, algo que es detectado por la aplicación que monitoriza a los vehículos y cuenta con estadísticas de siniestralidad, al mismo tiempo que el servicio meteorológico con el que está conectada, alerta de bajas temperaturas para ese área y fuertes lluvias en un intervalo de cinco minutos. Nuestra APP envía inmediatamente una alerta al vehículo, también conectado a Internet, para que muestre un aviso en el salpicadero con toda esta información relevante para el conductor, advirtiéndole que reduzca la velocidad y la adapte a las inminentes condiciones de la vía, o incluso podrían activarse medidas de seguridad autónomas integradas en el propio vehículo si es que este no esta ya, en el momento en que lea este artículo, en modo de conducción autónoma. Todo ello sin que su ocupante haya tenido que realizar ninguna acción.
¿Qué puede significar esto para las empresas si trasladamos este ejemplo a todos los posibles ámbitos?
Una empresa moderna deberá tener la mayor integración posible entre todos los dispositivos que utilice. No quiere decir que tenga que implementar que sus programas o aplicaciones tengan que estar todas conectadas entre sí y entre todos los dispositivos que utilice, pero sí que sepa detectar cuando esto puede suponer un beneficio y obrar en consecuencia.
El Internet de las cosas permite una recopilación de datos más eficiente desde fuentes muy distintas. Datos acerca de la actividad de empleados, clientes, sedes, coches, teléfonos, tráfico de internet, pueden suponer una gran fuente de información sobre el funcionamiento de la empresa y sus potenciales problemas, todo en tiempo real.
Al mismo tiempo, el amplio abanico de dispositivos conectados puede hacer que se abran oportunidades para la empresa en cuanto a los servicios que puede prestar o cómo prestarlos. Bien desarrollando apps, permitiendo métodos de pago más ágiles, personalizando la manera de trabajar a las necesidades de cada cliente, gestionando mejor las prioridades de cada incidencia, viendo qué profesional de la empresa se adapta mejor y resuelve más rápido las interacciones con cada cliente… las posibilidades son infinitas.
Por supuesto, este apasionante futuro requiere que todo se trate con la profesionalidad y seriedad que garantice la máxima privacidad y seguridad. Como toda herramienta y tecnología, requiere un proceso de implementación que garantice la seguridad para usted, su empresa, sus empleados y sus clientes. En manos de expertos, el Internet de las cosas abre nuevos horizontes para la empresa en particular, pero sobre todo para la humanidad en su conjunto.